komando guindilla

Descripción

Son muchas las leyendas que se cuentan acerca del nacimiento de esta banda de L’Hospitalet... aunque ninguna de ellas es cierta. En realidad la idea surgió hará 4 años en las cabezas de algunos de sus componentes que, muertos de envidia hacía aquellos que hacen saltar a la gente (y siempre con un espíritu musical y comprometido...), decidieron juntarse en un pequeño local y empezar a versionar a grupos como Skalariak, Obrint Pas, etc. El grupo fue creciendo, se fue metamorfoseando y los nuevos vientos -y no me refiero a trompetas y clarines en este caso- trajeron cambios y nuevas expectativas al grupo que ya empezaba a crear su propia música.

Con el salto a la fama llegaron los conflictos epistemológicos: tenían que buscarle un nombre a aquel proyecto musical. Largos días dándole vueltas al tema en el local, en casa, en el bar (donde aparecieron propuestas tan poco significativas como Los prepucios sucios¿?) y en el chino en el que siempre acababan las cenas con una ronda de guindillas... ¿guindillas?¡Estaba naciendo el Komando !

Tenían nombre, un pequeño repertorio y un local algo más grande y mejor equipado en el que ensayar... sólo faltaban bolos. No explicaré detalle a detalle los conciertos que han protagonizado; si tenéis ocasión verlo por vosotros mismos (¡aprovechar ahora que aún no cobran entrada!) pero, haciendo hincapié en su eterna humildad, recordamos el primer concierto en el que tocaron 4 canciones -gracias a los servicios(?) de seguridad(?) y a algún vecino al que no dejaban escuchar Noche de fiesta- y el paseo matinal en Molins de Rei después de un duro concierto en el que no faltaron los incondicionales bailando y coreando esos Gritos de Furia, Soy Guindilla, Va x ellos...

¿Dónde acabarán los del Komando ?... es una pregunta a la que desde mi anonimato y moralidad no quiero dar respuesta. No los busquéis en grandes superficies, no esperéis encontrarlos en Eurovisión... la verdad está ahí fuera, en la calle, y en la calle seguirán mientras quede gente a laque los ritmos a contratiempo, los vientos y las letras que proponen no les parezcan indiferentes.