el cruce sobre el níagara

Descripción

Es casí de noche. Blondin, en su casa, horas después del último cruce sobre el Niágara, recibe la inesperada visita de un joven admirador que ha seguido toda su trayectoria.
Lejos de halagarle con elogios, Carlo viene para hecerle un serio reproche sobre el más reciente cruce: El Gran Blondín ha hecho trampas, cosa que en un artista de su talento es imperdonable.
todo lo que se promete hay que cumplirlo, sobre todo si se anuncia, si se cobra una entrada...

El dramaturgo peruano Alonso Alegría levanta el episodio real, histórico, del cruce sobre el Niágara de un equilibrista francés -Jean François Cravelet El Gran Blondin- que en 1870 cruzó dieciocho veces el caudaloso río sobre la cuerda floja. Transformando el hecho de una poderosa metáfora, Alegría nos habla del transcurrir de la vida misma hacia una orilla esperanzadora: la realización del individuo como ser profundo y comprometido con la existencia.
El Cruce sobre el Niágara nos muestra la posibilidad del vuelo interior como culminación de la persona, pero no en solitario sino en conjunción con el otro, siendo capaces -en la lucha dialéctica que se produce en el encuentro- de crear un nuevo ser portador de la esperanza y de la creatividad necesario para una vida futura.